La alimentación keto, caracterizada por una dieta baja en carbohidratos, alta en grasas y rica en proteínas, ofrece numerosos beneficios para la salud, especialmente al evitar las proteínas animales. Muchos de ustedes pueden preguntarse cómo es posible mantener una dieta así, pero en este artículo exploraremos algunos aspectos interesantes.
Una dieta cetogénica basada en plantas y alimentos integrales, combinada con opciones libres de gluten, no solo ayuda a perder peso, sino que también mejora la claridad mental. La pérdida de peso va acompañada de una evolución de la conciencia. Además, es excelente para personas con enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer, el Parkinson o la esclerosis múltiple (EM), así como para diabéticos y pacientes con cáncer y sirviendo como medida preventiva.
¿Qué es Keto?
Normalmente, el cuerpo metaboliza continuamente los carbohidratos en glucosa para mantener los niveles de azúcar en sangre y especialmente para suministrar al cerebro. Cuando los carbohidratos son escasos, el cuerpo recurre a sus reservas de grasa y las convierte en cetonas en el hígado, que luego satisfacen las necesidades energéticas del cuerpo, similar a lo que pasa en un ayuno. En este estado, el cerebro y el corazón incluso funcionan un 25% mejor, según descubrió el neurólogo estadounidense David Perlmutter. Con una dieta cetogénica baja en carbohidratos, el cuerpo está prácticamente en un estado de ayuno, lo que puede forzar al cuerpo a quemar grasa.
Una Nueva Perspectiva (extracto de Peace Food - Cura Keto de Dr. Rüdiger Dahlke)
"La muerte reside en el intestino" - El doctor austriaco F.X. Mayr lo sabía hace mucho tiempo, como fundador de la cura del mismo nombre. Esto es cada vez más confirmado por la ciencia.
La restauración de los intestinos se logra mejor a través del ayuno consciente y una transición posterior a una dieta vegetariana o vegana, basada en plantas y alimentos integrales. La cura cetogénica va un paso más allá y es una oportunidad adicional tanto para los enfermos como para los sanos para influir positivamente en su salud a través de la nutrición.
Investigadores del Trinity College Dublin descubrieron que algunas células del sistema inmunológico, una vez privadas de glucosa, estimulan el sistema inmunológico. Estas llamadas células dendríticas son parte de nuestro sistema inmunológico que está alerta ante signos de peligro: la vigilancia del sistema inmunológico aumenta cuando hay poca o ninguna glucosa circulante.
Una vez que estas células dendríticas dejan de recibir glucosa, activan los linfocitos T del sistema inmunológico. Estas son las células cruciales que faltan en el SIDA. Trabajan en primera línea contra infecciones y tumores. Esto significa que reducir la glucosa y, en última instancia, los carbohidratos, puede ayudar a minimizar el cáncer y todos los procesos inflamatorios. Esto no solo se aplica a la inflamación en las articulaciones y amígdalas, sino también a problemas cardíacos como los ataques cardíacos y, en última instancia, todos los síntomas arterioscleróticos, ya que siempre están involucrados procesos inflamatorios. También se aplica en algunos tipos de cáncer, donde la participación viral esta comprobado, como por ejemplo en el cáncer de cuello uterino.
David Finlay, jefe del grupo de investigación del Trinity College, dice: "Queda claro que la glucosa es una molécula de señalización importante en el sistema inmunológico y que las células que tienen acceso a la glucosa se comportan de manera completamente diferente a las que carecen de ella."
Algunas de las frases clave de este estudio: Reducir los carbohidratos del pan y la pasta podría equipar mejor a nuestro sistema inmunológico para combatir enfermedades. En algunos casos, los azúcares simples pueden obstaculizar el trabajo del sistema inmunológico y así promover la enfermedad.
(Fuente de los beneficios científicamente probados: Libro "Simplemente ayunar" de Dr. Rüdiger Dahlke)
Keto - una Dieta que Puede Prevenir y Curar
Por supuesto, la situación individual es decisiva para el alcance de la reducción de carbohidratos. En el caso de una dieta contra el cáncer, los carbohidratos deben ser omitidos de manera aún más consistente y los cereales deben ser evitados en mayor medida. Las lupinas son una base importante aquí. En el caso de enfermedades neurodegenerativas, es particularmente importante asegurarse de que la dieta sea libre de gluten y ATIs y contenga muchas grasas buenas para nutrir los nervios.
Un estilo de vida fitness con aumento muscular, por otro lado, requiere menos grasa y más proteínas. En este caso, la lupina es más importante que el aceite de coco. Una dieta keto por razones de salud general es naturalmente menos estricta y también permite más frutas dulces y naturalmente más legumbres.
Pero incluso con una dieta cetogénica predominantemente estricta, hay poco que decir en contra de los carbohidratos de verduras orgánicas. Su proporción es baja en la gran mayoría de las verduras de todos modos, y la mayoría de las verduras tienen un bajo índice glucémico. Pero por supuesto, hay un argumento sólido en contra de los carbohidratos refinados y los cereales modernos en cualquier dieta. Su gluten, que ahora está hasta un 40% más presente en el trigo que en las variedades originales, nos atasca literalmente la vida, al igual que los productos lácteos.
Las grasas y aceites saludables forman la base de todas las variantes de la dieta keto. Es importante asegurar una proporción equilibrada de ácidos grasos omega 3 a omega 6 para que nuestro cerebro siempre reciba la mejor grasa como alimento y para su propia regeneración. (Se deben evitar el aceite de girasol y el aceite de cardo, pero muy recomendable el aceite de coco).
Las buenas proteínas, como las de las legumbres y especialmente las lupinas dulces azules, son el segundo pilar de la dieta keto. De lo contrario, es una dieta basada en alimentos integrales y vegetales con muchas verduras y una pequeña cantidad de frutas buenas y maduras al sol. Los cereales sin gluten y los pseudocereales como el mijo, el arroz, la quinoa, el amaranto y la maravillosa planta con flores del trigo sarraceno, así como los cereales originales con bajo contenido de gluten como el kamut, la espelta y el emmer, están permitidos en cantidades moderadas.
Para las personas que quieren perder peso, ésta es una gran oportunidad. Para los enfermos de cáncer y los que padecen enfermedades neurodegenerativas, la cetona-gen es tan imprescindible como los alimentos integrales de origen vegetal y, para estos últimos, también sin gluten.
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